Voluntad política y altura de miras
Como majadera y tonta calificó Evelyn Matthei la posición que tomara la presidenta Bachelet referente al bullado caso de desfalco al Banco de Talca en el año 1982. La señora Matthei tiene una forma muy “particular” de decir las cosas, casi sin filtro, llegando a ser elegantemente insolente, soberbia y desvergonzada , a veces irrespetuosa, pero sin caer en lo ramplón , cualidad que es producto de un sentimiento de protección heredado del gobierno militar , del que su padre fue gestor junto a Augusto Pinochet Ugarte.
Los temas de agresión y denuesto del adversario político no son cosa trivial ni nueva, es atávico a la clase política, casi folclórico, hacen recordar a la farándula, a las demandas de la Pamela Díaz y a sus peleas con otras modelitos del medio, a los titanes del ring, a los tres chiflados… hasta hace poco resultaba hasta cómico presenciar los contínuos “dimes y diretes” entre los candidatos a la presidencia algo así como “ combos iban…combos venían” del flaco de dinamita show, francamente un circo. Ya es suficiente, sus escenas de histeria por ver posibilidades de perder el poder son patéticas, faltas de fondo, agónicas, indiscutiblemente los señores candidatos están dando un triste espectáculo, paupérrimo, desgastado. Hagamos una “campaña con altura de miras” expresó Sebastián Piñera al comando de Frei, una frase constructiva, conciliadora. Lógico lo que está en juego es muy importante, sobretodo si en este jueguito es él el que sale perdiendo, la lógica de los candidatos es no dar explicaciones sino contrarrestar con un nuevo ataque desesperado para salir limpios como una blanca paloma.
Desesperado se ve al comando de Frei, las contínuas riñas internas de la concertación les están pasando la cuenta y hasta el PRSD quiere reponer la candidatura de José Antonio Gómez si no llegan a un buen acuerdo en la lista parlamentaria. Lamentable, aún no se olvidan las peleas impresentables entre Camilo Escalona y José Antonio Gómez cuando Frei ganó las primarias de la concertación de las cuales fue excluido Ominami y dio origen a su descuelgue díscolo. ¿Que pasa en Chile? Nada. Lo mismo de siempre, mientras la crisis azota a la clase media trabajadora (ni hablar de los pobres) los señores se pelean con uñas y muelas por perpetuar su poder. Mientas tanto la cesantía se empina sobre los 10.7% llegando a un 19% sólo en Valparaíso. Definitivamente necesitamos cambios pero más que eso, necesitamos la voluntad política para poder realizarlos.
Como majadera y tonta calificó Evelyn Matthei la posición que tomara la presidenta Bachelet referente al bullado caso de desfalco al Banco de Talca en el año 1982. La señora Matthei tiene una forma muy “particular” de decir las cosas, casi sin filtro, llegando a ser elegantemente insolente, soberbia y desvergonzada , a veces irrespetuosa, pero sin caer en lo ramplón , cualidad que es producto de un sentimiento de protección heredado del gobierno militar , del que su padre fue gestor junto a Augusto Pinochet Ugarte.
Los temas de agresión y denuesto del adversario político no son cosa trivial ni nueva, es atávico a la clase política, casi folclórico, hacen recordar a la farándula, a las demandas de la Pamela Díaz y a sus peleas con otras modelitos del medio, a los titanes del ring, a los tres chiflados… hasta hace poco resultaba hasta cómico presenciar los contínuos “dimes y diretes” entre los candidatos a la presidencia algo así como “ combos iban…combos venían” del flaco de dinamita show, francamente un circo. Ya es suficiente, sus escenas de histeria por ver posibilidades de perder el poder son patéticas, faltas de fondo, agónicas, indiscutiblemente los señores candidatos están dando un triste espectáculo, paupérrimo, desgastado. Hagamos una “campaña con altura de miras” expresó Sebastián Piñera al comando de Frei, una frase constructiva, conciliadora. Lógico lo que está en juego es muy importante, sobretodo si en este jueguito es él el que sale perdiendo, la lógica de los candidatos es no dar explicaciones sino contrarrestar con un nuevo ataque desesperado para salir limpios como una blanca paloma.
Desesperado se ve al comando de Frei, las contínuas riñas internas de la concertación les están pasando la cuenta y hasta el PRSD quiere reponer la candidatura de José Antonio Gómez si no llegan a un buen acuerdo en la lista parlamentaria. Lamentable, aún no se olvidan las peleas impresentables entre Camilo Escalona y José Antonio Gómez cuando Frei ganó las primarias de la concertación de las cuales fue excluido Ominami y dio origen a su descuelgue díscolo. ¿Que pasa en Chile? Nada. Lo mismo de siempre, mientras la crisis azota a la clase media trabajadora (ni hablar de los pobres) los señores se pelean con uñas y muelas por perpetuar su poder. Mientas tanto la cesantía se empina sobre los 10.7% llegando a un 19% sólo en Valparaíso. Definitivamente necesitamos cambios pero más que eso, necesitamos la voluntad política para poder realizarlos.
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